Queridos y queridas compatriotas de todas las provincias de Ayacucho y el Perú.
Quiero agradecer su importante participación y asistencia a este histórico recinto que hoy nos acoge de manera cálida y auspiciosa; quiero también darles la bienvenida y transmitirles el fraterno saludo de nuestro candidato presidencial el Embajador Manuel Rodríguez Cuadros, a quien los peruanos recién empiezan a conocer e identificarse animadamente con su candidatura y propuesta de gobierno; así mismo transmitirles también el saludo entusiasta de nuestra lideresa Susana Villarán, de quien traemos hoy día su chalina verde limón, que la acompañó en su dura campaña hacia el sillón municipal en nuestra capital. Para ellos dos, líderes nacionales pido un fuerte voto de aplausos.
Fuerza Social está practicando una nueva forma de hacer política en el país, y una clara manifestación de ello es el proceso de elecciones internas llevado a cabo a nivel nacional para la elección del Candidato Presidencial, las vicepresidencias y los candidatos al Congreso de la República y al Parlamento Andino.
Fuerza Social le está dando a la democracia peruana el aire fresco de una nueva actitud y una nueva conducta en la vida política nacional. La conducta que respeta al otro, la conducta que decide consultando y no imponiendo.
Asumo esta responsabilidad ciudadana de forma madura, alegre y entusiasta, pero también de modo sereno y cauto, mi identificación y compromiso va especialmente con quienes aún viven los padecimientos de la pobreza y la extrema pobreza, de los excluidos y marginados, nuestros campesinos de la sierra y la selva, nuestra clase media trabajadora y de los jóvenes, poco entendidos pero tan entusiasta y emprendedores ellos.
El país atraviesa una dinámica de crecimiento macroeconómico, en varias regiones se está disminuyendo la pobreza y se están recomponiendo las clases trabajadoras, este proceso es muy bueno y debe continuar, hay que cuidarlo y fortalecerlo; sin embargo este crecimiento es débil y lento en nuestro Ayacucho, que padece increíblemente una serie de males endémicos de los que no hemos podido liberarnos. Por lo tanto este crecimiento está teniendo una mala redistribución de la riqueza y una concentración en pocos sectores, tenemos un déficit en la redistribución justa razonable del ingreso. En este contexto será vital subir a nuestro Ayacucho al tren del desarrollo productivo, del desarrollo comercial y darle además el impulso a la educación técnica y científica y fortalecer nuestra identidad, identidad de hombres y mujeres andinos de mucha tradición, historia y coraje.
Una labor trascendental del nuevo gobierno, será trabajar para romper nuestra dependencia económica basada casi exclusivamente en la producción y exportación de materia prima, estamos en un contexto positivo pues los grandes mercados como la China y la India están demandando nuestra producción, sin embargo no podemos depender de esta demanda, hay que diversificarla emprendiendo labores de manufactura masiva, es decir hay que industrializar al país, hay que dar valor agregado a nuestra producción y ya transformada hay que venderla a los mercados internacionales, y hay que traer parte de esa industria a nuestro Ayacucho.
Esta cadena de producción, transformación y comercio proveerá de mayor riqueza para nuestra nación y nuestra gente, mayor cantidad de puestos de trabajo, mayor demanda por la innovación y desarrollo tecnológico y por ende se logrará el despegue en la educación y el conocimiento; no hay que tenerle miedo a la inversión, al progreso y al desarrollo tecnológico de los tiempos modernos, desde el Congreso de la República trabajaremos arduamente en apoyar al ejecutivo en políticas de inclusión de nuestros sectores oprimidos en esta labor de producción, manufactura y comercio; pero también en la búsqueda de la concertación con las comunidades, hablando y asesorando con sinceridad y franqueza, y respetando sus decisiones.
A nuestra gente y en especial a los jóvenes que viven y trabajan aquí, que se alegran y sufren, que se ilusionan y desilusionan en nuestro Ayacucho, a todos ellos, desde Llochegua en nuestro Vrae hasta Pauza en Paucar del Sara Sara en el sur ayacuchano, recorriendo todas y cada una de las provincias y distritos de Ayacucho, quiero darles un mensaje que refuerza el ánimo y el entusiasmo por un gran futuro de nuestro Ayacucho y nuestro Perú, pues son también los jóvenes una población vulnerable, la falta de empleo y la incertidumbre del mañana los afecta; pero a la vez son también el mas grande capital social que tiene el país y Ayacucho para dinamizar una política cultural diversa y plural, para rehacer la política, y es solo con el concurso activo de la juventud que lograremos recuperar nuestra capacidad de soñar una sociedad libre y mas justa.
En ese sentido convoco a las juventudes a realizar juntos este sueño de cambiar al país.
Nunca aceptaremos que nos digan que la corrupción es natural.
Nunca aceptaremos que nos digan que la pobreza siempre va a existir.
Nunca aceptaremos que nos digan que siempre se van a mancillar los derechos de las minorías.
Reivindicamos nuestra capacidad de soñar en la obtención del bien común.
¡Que vivan Ayacucho y el Perú!
Muchas gracias.
