domingo, 3 de octubre de 2010

Nadie sabe para quien trabaja

Es víspera de las elecciones, éste sábado recién se respira la tranquilidad de vernos liberados de la bulliciosa campaña electoral.


Tengo la impresión que el remate de guerra sucia contra Susana Villarán de esta última semana de campaña electoral viene de Palacio de Gobierno, ¿quién tiene tanto poder para hacer de la mayoría de los medios una comparsa?, esta semana que inició con el debate ya casi no hubieron espacios limpios para Susana, todo fue ataque tras ataque, pero ésta vez tengo la alegría de ver que la gente se da cuenta que se trata de un grosero proceso de demolición y ya no hace caso.


Me sorprende una parte de la derecha peruana, incluida varias amistades, que muestran una intolerancia salvaje y totalitaria en contra de una línea política natural e importante como lo es la izquierda moderada, moderna y progresista, a la cual no dudan en llamar roja, terrorista, comunista, radical, lanza piedras, farquista, chavista, etc, en este caso los radicales y totalitarios, que deberían asustarnos son ellos mismos, que quieren ser los únicos en el espectro político nacional y no aceptan ni toleran siquiera el simple hecho que exista un nuevo partido político serio y de izquierda inteligente.


El crecimiento económico peruano es una realidad, el tren del progreso va rápido y firme y ello augura un buen futuro para nuestro país, lástima que el proceso sea largo, arduo, complicado y que sus beneficios aún no se evidencien con mayor nitidez en las clases populares, tan impacientes como trabajadoras; sin embargo la delincuencia, el caos en el transporte urbano, los bajos niveles que aún tenemos en educación, la corrupción y un lento y saturado sistema de salud entre otros factores dan la apariencia opuesta al auge económico del país, es decir muestran nuestro Perú, incluida su enorme capital como una ciudad laberintosa y desorganizada. Buena parte de estas personas populares y trabajadoras mencionadas, aún no creen que el país se ha encarrilado y que ahora hay que seguir el camino con dos ingredientes paciencia y mucha labor honesta, por el contrario piensan y sienten que van mal y maldicen haber creído las historias de un cuco cuando en el 2006 todo el aparato se fue contra Ollanta (yo creo que exageraron pero también creo que efectiva y proclamadamente Humala era y es el antisistema, camino errado para los intereses reales del país), esa guerra exagerada y sobredimensionada es percibida ahora otra vez, pero esta vez, ya no creen en el supuesto cuco llamada ahora “caperucita”, y en esta ocasión aciertan pues Susana Villarán cree en la economía de mercado y no tiene nada que ver con los radicalismos y antisistemas; es decir nadie sabe para quien trabaja y le beneficia que el pueblo ya no crea en las guerras sucias, que no son del sistema, sino de la camarilla de los pocos partidos políticos en el poder, que acostumbra disparar contra quien ose disputarle el gobierno.


Mañana, domingo 3 de octubre a esta hora espero estar aclamando el triunfo de Fuerza Social y la importante consolidación de una organización política seria en la vida de nuestro querido Perú.


Así como espero el triunfo electoral de mis amigos y excelentes candidatos: Fredy Mauricio en Huamanguilla, Celina Salcedo en Huamanga, Carlitos Alviar en la regional de Ayacucho, Ranulfo Cavero en la consejería por Huamanga y José García en una regiduría por Huamanga.